«Un 36% de la flota global de portacontenedores tendrán depuradores instalados, aunque varios no estarán listos para la OMI 2020».
La regulación de la OMI para la emisión de una máximo de 0,5% de azufre en el combustible marino y que que entrará en vigor el 1 de enero de 2020 parece dividir a las navieras en dos grupos distintos. Uno de ellos son lo que contarán con un alto porcentaje de depuradores en su flota y otros con una escasa cifra en la materia.
Según Drewry, en este último grupo se estima que solo se contará con un promedio de solo el 1% de los barcos equipados con los sistemas de limpieza de gases de escape, es decir solo un puñado de embarcaciones, publicó The Loadstar. Este primer grupo incluirá a los defensores del fuelóleo con bajo contenido de azufre (LSFO) y los transportistas «anti-scrubber» como Maersk, Hapag-Lloyd, ONE, Cosco, Yang Ming y PIL.
El segundo grupo, que Drewry define como un grupo «con un alto porcentaje de depuradores en su flota» tendrá un promedio del 7% de sus embarcaciones con dicha tecnología e instalada a tiempo del inicio de la norma IMO 2020, lo que representa un promedio del 10% de su capacidad.
Se espera que este grupo, liderado por MSC, posiblemente la línea más pro-depuradora, tenga alrededor de 250 de su flota de 560 buques equipados con depuradores para el 1 de enero. En el caso de Evergreen se estima que cuenten con 140 buques de de su flota, de 208 efectivos, con un depurador instalado.
En el mismo grupo está CMA CGM, que también recibirá nueve ULCV alimentados con GNL de 23,000 teu el próximo año y HMM subsidiado por el estado de Corea del Sur, que tiene una orden para nueve barcos de 23,000 teu equipados con depuradores.
«El consultor de la industria Alphaliner estima que unos 840 portacontenedores, que equivalen a alrededor de 8,1 millones de teu y que representan el 36% de la flota global de contenedores por capacidad, tendrán depuradores instalados, aunque varios no estarán listos para la OMI 2020, debido a retrasos en diversas materias como por ejemplo la instalación y el trabajo en diques secos».
Las navieras que están invirtiendo millonarias cifras en tecnología de depuración para sus buques han apostado por la continuación de un diferencial de precios significativo entre HFO y LSFO para recuperar el costo y la interrupción operativa del proceso de instalación, así como para ser más competitivos.
Cabe destacar que las navieras que no tengan depuradores instalados en sus barcos deberán comenzar a reponer los tanques de estos buques en el último trimestre del año para cumplir con la OMI 2020, publicó The Loadstar.
Fuente: https://www.alphaliner.com/